jueves, 8 de octubre de 2015

Sra. Carmena, ¿nos aclaramos o no con las gestión privada?




Este semana el consistorio presidido por la superabuela Carmena nos vuelve a sorprender con sus propuestas contradictorias fruto de una mente errática o de una improvisación preocupante.
A principios de semana el Ayuntamiento prometía que en el 2016 tomaría el control total de los tanatorios y los cementerios (ya estamos acostumbrados a la afición necrófila de la izquierda universal); según los cualificados portavoces del gobierno municipal este cambio en el modelo de gestión (de gestión semiprivada a gestión pública) se debe al deseo de mejorar la sostenibilidad y eficiencia en la gestión de los servicios funerarios.
Hasta aquí poco tendríamos que decir sin conocer más a fondo la propuesta global del Ayuntamiento, y sin saber si efectivamente el actual consistorio está suficientemente capacitado para la gestión y administración de los servicios funerarios madrileños. Por otro lado poco nos puede sorprender esta noticia en un Ayuntamiento liderado por aquellos que pretenden desterrar la iniciativa privada del solar patrio, y poco nos puede sorprender que los comunistas sospechen de la gestión privada y apuesten por la gestión pública, pues al fin y al cabo los últimos 40 años de la historia española nos han demostrado que desde los gobiernos locales y regionales no se practica la corrupción ya que este vicio solo es predicable de las empresas privadas y de los desaforados ciudadanos.

domingo, 19 de julio de 2015

La verdad histórica: La guerra la ganamos los buenos.


Se ha puesto de modo entre determinados políticos e “historiadores” juzgar los acontecimientos históricos desde la perspectiva de la memoria. Esto tiene un serio inconveniente: el carácter contingente del ser humano.
 
Efectivamente, según define el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, memoria es “la facultad psíquica por medio de la cual se retiene y recuerda el pasado”. Facultad psíquica que obviamente acompaña a la persona física, es decir: la memoria sólo existe en tanto en cuanto exista el sujeto capaz de recordar.

Qué duda cabe que aún hoy quedan testigos vivos de los gloriosos hechos que abarcaron desde el 18 de Julio de 1936 hasta el 1 de Abril de 1939, pero, ¿qué pasará dentro de 15 ó 20 años?, ¿cómo interpretarán esos mismos políticos e “historiadores”, la historia desde la perspectiva de la memoria?

martes, 7 de julio de 2015

Laudato si


Recientemente leí en una web una frase que no por cierta me resultó menos sorprendente “ser verde no es de rojos”. Efectivamente, parece que la izquierda en el campo ecológico, al igual que en otros campos, se ha apropiado de determinados conceptos y de determinadas sensibilidades con el objeto de excluir a los demás de dicho debate.

No obstante acertadamente el Papa Francisco nos plantea en su última encíclica Laudato si retomar una conciencia ecológica que muchos teníamos olvidada.

Ahora bien, como no podía ser de otro modo el Papa Francisco plantea un ecologismo muy superior al ecologismo ideológico tan de moda; su superioridad encuentra su razón de ser en dos claves: por un lado el ecologismo que nos plantea Francisco es fruto de la concepción de la naturaleza como creación, creación que fue realizada por Dios para el uso y conservación por parte del hombre. Y por otro lado la clave que permite superar a otras concepciones ecológicas es que el Papa nos plantea un ecologismo global, integral, coherente y multidisciplinar al entender al hombre y a las creaciones humanas dentro de las corrientes ecológicas.

domingo, 5 de julio de 2015

El mito de la democracia deliberativa.


Podemos decir que la democracia actual es una forma de resolver los conflictos sociales y políticos. En este artículo ni vamos a entrar en la valoración de si la democracia es la mejor forma de gobierno, ni entraremos a considerar si la democracia de partidos es el mejor cauce para solventar los conflictos de intereses que se producen en cualquier sociedad.

Nuestro único objetivo es comparar la eficacia en la resolución de conflictos entre la democracia institucionalizada por los partidos políticos, y la democracia deliberativa o democracia directa defendida por los partidos emergentes como solución de todos los conflictos sociales.

En este sentido se hace preciso realizar algunas precisiones.